1. La existencia de un nuevo ecosistema comunicativo e informacional.
2. La incorporación de lo digital al universo de la lectura.
3. La llegada de un espacio virtual como entorno social relacional y comunicativo en la sociedad contemporánea.
Se constata el surgimiento de nuevas prácticas lectoras asociadas a la incorporación de lo digital en el universo de la lectura. Ello precisa que la biblioteca ejerza su función de fomento de la lectura contemplando todo tipo de soportes y realizando acciones especificas de mediación en referencia a la calidad de los contenidos confeccionando itinerarios y fomentando la interconexión entre los lectores al facilitar dinámicas de retroalimentación de la lectura.
Y, finalmente, no podemos olvidar la presencia de nuevas prácticas comunicativas vinculadas al uso del espacio virtual como entorno social relacional y comunicativo. La biblioteca debe aprovechar esta oportunidad para expandir sus acciones más allá de los muros físicos que configura su entorno presencial. La dinámica propia de la biblioteca como agente de conexión social resulta expandida en el entorno digital al poder establecer con la comunidad educativa canales de comunicación múltiples, que se presentan sincrónicos y permanentes.
Texto extraído del artículo:
Repensar la biblioteca escolar. La necesidad de considerar su transformación como un reto y una oportunidad. Por Glòria Durban Roca y José García Guerrero en portal Libro Abierto (2013).