lunes, 28 de enero de 2013

Estrategias para retroalimentar la lectura. La creación de un “muro físico" en la biblioteca y un “blog" para las recomendaciones. Dos herramientas complementarias para provocar el deseo de leer

Una de las estrategias clave para el fomento de la lectura es la de establecer mecanismos para que los mismos alumnos puedan compartir y recomendar de forma personal sus lecturas. Esto resulta importante porque provoca un efecto beneficioso que retroalimenta la lectura.

Al mismo tiempo la biblioteca debe también disponer de herramientas que le permitan ejercer su función mediadora facilitando al alumnado y a la comunidad educativa propuestas específicas de lectura o itinerarios lectores. Para ello todas las herramientas tanto tradicionales como digitales pueden ser útiles si se articulan al servicio de este objetivo.

Una posibilidad es la disposición en la biblioteca de un “muro físico” donde los alumnos coloquen "tarjetas de recomendaciones" que incluyan solo la información relevante del libro que se desea recomendar. Título, autor  y código de localización en la biblioteca.  Las tarjetas también pueden incluir opiniones personales y diseñarse de colores para indicar de forma más visual el género literario.

Resulta muy interesante que estas "tarjetas" incorporen los datos de localización (ej. I2 Per / I3 Dos) ya que permite que los chicos y chicas consideren estos datos como relevantes porqué les va a permitir encontrar de forma autónoma el libro recomendado. También dan utilidad a la formación recibida en el uso y conocimiento de la biblioteca.

De forma paralela la biblioteca puede realizar sus recomendaciones confeccionando un blog para esta  misión de forma exclusiva. A demás del propio blog de biblioteca. Se trata de diseñar un blog donde en cada “post” se incorpora la misma información que en las "tarjetas" de papel pero donde se incluye la sinopsis del libro, una imagen de la portada y un vídeo o tráiler sobre su contenido. Al mismo tiempo el blog permite la interacción del alumnado con la posibilidad de incluir comentarios personales de los libros recomendados.

Vemos con este ejemplo que desde la biblioteca podemos utilizar el entorno digital para ayudar a nuestros alumnos y alumnas a encontrar la lectura deseada  o provocar el deseo de leer.  Pero lo que resulta más interesante es visualizar que esta acción nos permite al mismo tiempo vincular los libros "descubiertos digitalmente" al entorno físico de la biblioteca porqué realmente no hay una frontera definida y separadora entre los dos entornos sino una retroalimentación.

BiblioClot / de Primària de la Escola del Clot - Barcelona



BiblioClot / 1r cicle d'ESO - Escola del Clot- Barcelona