Porqué la tecnología ha de actuar al servicio de las situaciones de aprendizaje. Está en manos del profesorado decidir cómo se utilizan y para qué se utilizan. Las TIC tienen un gran potencial si los aprendizajes se vinculan al desarrollo de hábitos de trabajo de pensamiento y a la experiencia continuada del trabajo colaborativo. Estos con independencia del tipo de tecnología utilizada (digital o tradicional) representan pilares fundamentales para la educación escolar.
En este sentido las tecnologías digitales son potentes si se utilizan al servicio de aprendizajes significativos adecuadamente diseñados por el profesorado. Su implementación puede ayudar a redescubrir los aspectos fundamentales de una concepción de la enseñanza y del aprendizaje basada en la articulación de situaciones concretas de comprensión y construcción de sentido (de forma personal y / o colaborativa) fruto de la interacción con información.
La clave para ello es el diseño y articulación de situaciones de aprendizaje que representen tareas concretas situadas en contextos cercanos al alumnado y que respondan a fines específicos. Actividades que impliquen una interacción con la información y que permitan al alumnado construir significados, en referencia a los contenidos que trabajan en el aula, haciendo cosas con la información tratada.
Así pues hay que considerar que no sólo incorporando las tecnologías digitales en la escuela lograremos que estas se utilicen con la potencialidad de uso que tienen para favorecer aprendizajes escolares significativos. Como indica Cesar Coll [1]: "La introducción de las TIC tienen sentido y una potencialidad transformadora cuando se incardinan en procesos de reflexión y de innovación didáctica y pedagógica. Porque entonces el profesorado descubre las potencialidades de uso que tienen que no habían pensando nunca. Y esto modifica la práctica. Por lo tanto se requiere no únicamente la presencia de las TIC sino la presencia de la dinámica de innovación en los centros. Es en este círculo virtuoso donde está la clave de la mejora de las prácticas docentes vinculadas a las tecnologías digitales".
[1] Vídeo de la entrevista a Cesar Coll sobre Les TIC creen noves situacions d'avaluació.
La clave para ello es el diseño y articulación de situaciones de aprendizaje que representen tareas concretas situadas en contextos cercanos al alumnado y que respondan a fines específicos. Actividades que impliquen una interacción con la información y que permitan al alumnado construir significados, en referencia a los contenidos que trabajan en el aula, haciendo cosas con la información tratada.
Así pues hay que considerar que no sólo incorporando las tecnologías digitales en la escuela lograremos que estas se utilicen con la potencialidad de uso que tienen para favorecer aprendizajes escolares significativos. Como indica Cesar Coll [1]: "La introducción de las TIC tienen sentido y una potencialidad transformadora cuando se incardinan en procesos de reflexión y de innovación didáctica y pedagógica. Porque entonces el profesorado descubre las potencialidades de uso que tienen que no habían pensando nunca. Y esto modifica la práctica. Por lo tanto se requiere no únicamente la presencia de las TIC sino la presencia de la dinámica de innovación en los centros. Es en este círculo virtuoso donde está la clave de la mejora de las prácticas docentes vinculadas a las tecnologías digitales".
[1] Vídeo de la entrevista a Cesar Coll sobre Les TIC creen noves situacions d'avaluació.